POR ANDRÉS RESILLAS
En una franca violación a la ley de expresión, el Congreso de Michoacán está exigiendo a los medios de comunicación de que si quieren un convenio de publicidad, su información deberá ser aprobada antes de ser publicada.
Los legisladores estipularon esa condición en una de las cláusulas del convenio de publicidad que firmaron con los medios de información locales y nacionales.
Ayer la periodista Patricia Monreal a través de su página de Facebook reveló el contenido del convenio de publicidad que la actual legislatura está proponiendo a las empresas periodísticas para que difundan sus actividades y su propaganda.
“CLAUSULA CUARTA: “El medio de comunicación deberá de generar contenido propio, el cual deberá ser presentado previamente a la Coordinación de Comunicación Social para su aprobación”. Así reza el Convenio o contrato de publicidad que pretenden firmar con los medios.
El artículo siete de la Constitución Política establece que no se puede aplicar una censura previa a la información, como lo pretende hacer el Congreso de Michoacán.
”Artículo 7o.– Es inviolable la libertad de difundir opiniones, información e ideas, a través de cualquier medio. No se puede restringir este derecho por vías o medios indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares, de papel para periódicos, de frecuencias radioeléctricas o de enseres y aparatos usados en la difusión de información o por cualesquiera otros medios y tecnologías de la información y comunicación encaminados a impedir la transmisión y circulación de ideas y opiniones.
“Ninguna ley ni autoridad puede establecer la previa censura, ni coartar la libertad de difusión, que no tiene más límites que los previstos en el primer párrafo del artículo 6o. de esta Constitución. En ningún caso podrán secuestrarse los bienes utilizados para la difusión de información, opiniones e ideas, como instrumento del delito.”
Ante esta pretensión del Congreso del Estado algunos periodistas michoacanos rechazaron firmar dicho convenio y acusaron a la actual legislatura de querer censurar a la prensa y de aplicar una especie de “ley mordaza” para que no sean cuestionados ni investigados todos los diputados locales.
El silencio de todas las fracciones parlamentarias del Congreso sobre esta condición impuesta a los medios para tener publicidad, demuestra una complicidad y acuerdo con la medida.