POR ANDRÉS RESILLAS
A 40 años de cárcel fue sentenciada Miriam C. por el asesinato de dos jóvenes originarias de Pátzcuaro y cuyos cuerpos aparecieron flotando en las aguas de la Presa de Cointzio en mayo del 2016.
Un Tribunal de Enjuiciamiento del Supremo Tribunal de Justicia decidió por unanimidad que Miriam C, tuvo participación activa en los homicidios, condenándola a una pena de 23 años de cárcel por cada uno de los asesinatos.
Sin embargo, debido a que la Constitución Nacional establece que el imputado no podrá permanecer más tiempo de la máxima pena establecida, la ahora sentenciada pasará 40 años bajo prisión.
En la audiencia, la Fiscalía y la Asesoría Fiscal solicitaron la pena de 40 años por cada uno de los homicidios, pues consideraron que hubo premeditación, alevosía, dolo y ventaja; además de que a las víctimas se les degradó exhibiendo sus cuerpos en un lugar público.
Acusaron a Miriam C. de planear sus muertes y de ejecutarlas con suma crueldad: a Dalila con un arma blanca desangrándola del cuello y a la menor de edad con iniciales F.E. asfixiándola con un cable, además de golpearlas profusamente en varias partes de sus cuerpos.
También el Tribunal condenó a la imputada para que repare el daño en materia económica y tendrá que pagar 369 mil pesos a los familiares de cada una de las víctimas
La Defensa por su parte solicitó la pena mínima para Miriam C. bajo el argumento de que no existían pruebas suficientes de que ella fuera la autora material de los dos crímenes.
Incluso la Defensa anunció que impugnará la sentencia en segunda instancia pues considera que en el juicio se cometieron irregularidades, como el de darle valor a la confesión escrita de Gabriel H. quien falleció el año pasado al interior del Cereso Mil Cumbres.
El abogado defensor explicó que es un acto irregular, pues no se pudo contradecir ni cuestionar el testimonio escrito de Gabriel H. «El Gabo» en el juicio.
La audiencia oral fue la última que se realizará sobre este caso. Todas las partes se negaron a asistir a la explicación de la sentencia por parte del Tribunal de Enjuiciamiento.
Esto pone fin a este caso del asesinato de dos jovencitas de Pátzcuaro, quienes cayeron en las garras de unos delincuentes sin escrúpulos.
Hasta el momento sigue prófugo de la justicia el novio de Miriam C. de nombre Cristian y apodado como “Castor” quien de acuerdo a los testimonios participó en el asesinato de las jóvenes.
Mientras que los demás sujetos como “El Fresa”, “Chilango” y “Chuky” están encarcelados y se les sigue proceso judicial por otros delitos graves.