LIBRE EXPRESIÓN… INICIO DE AÑO, NI CÓMO PONERSE OPTIMISTA. Por: Carlos Alberto Monge Montaño.

“Un pesimista, es un optimista bien informado”. Antonio Mingote Barrachina (1919 – 2012). Dibujante y humorista español.

Vaya manera en la que ha comenzado el 2019 en Michoacán. Difícilmente alguien se puede poner optimista. Prevalece la falta de liquidez que se agudiza en el último trimestre de cada año y para colmo, los cálculos del Ejecutivo Federal en cuanto a ingresos para el presente año, que avalaron legisladores federales, resulta que deben modificarse a la baja, por lo que el recorte inicial a Michoacán es de 2 mil 200 millones de pesos. El primer ajuste será de 124 millones de pesos y se aplicará en febrero, así lo informó el secretario de Finanzas del estado, Carlos Maldonado Mendoza.

Tal vez la emoción de iniciar una administración federal y pretender gobernar con el deseo y los discursos, Ejecutivo y Legislativo federales se alejaron de la realidad y calcularon que ingresarían más de 5 billones 830 mil millones de pesos para el presente ejercicio fiscal, de los cuales, más de 3 billones 311 mil millones se obtendrían vía impuestos, lo que representa un incremento mayor al 6 por ciento con respecto al año pasado.

Adicional, el precio promedio del barril de petróleo mexicano también los sobrevaloraron, así que lo consideraron con un promedio de 55 dólares por barril, con una producción diaria de 1 millón 847 mil barriles.

Al paso de las primeras tres semanas del año, las autoridades federales finalmente se percataron que no lograrán los ingresos esperados, ni en la recaudación vía impuestos, que se mantiene prácticamente igual que siempre, es decir, sin capacidad, inteligencia e inventiva para recaudar más, simple y mejor, apostando otra vez, por impactar a los mismos de siempre.

En el caso del precio del barril de petróleo, en lo que va del año no ha logrado alcanzar el precio estimado, su mejor momento fue de 54.14 dólares por barril y el peor, de 43.65 dólares, así que el promedio en lo que va del 2019 ronda los 50 dólares por barril.

El recorte afectará preponderantemente el presupuesto destinado al Fondo de Infraestructura Municipal, debido a que el 20 por ciento de las participaciones federales se destinan a este rubro. Pero además, semejante impacto obligará a que el Ejecutivo estatal mande una solicitud de ajuste presupuestal a la Septuagésima Cuarta Legislatura local, para definir en qué otros rubros tendrá que disminuirse el dinero a ejercer en el presente año.

A todo lo anterior hay que considerar las dificultades que se mantienen para pagar la nómina de más de 32 mil profesores con plaza estatal, que no han recibido la primera quincena de enero y les deben aún, cuando menos, 700 millones de pesos de prestaciones y bonos, mientras prevalece el desacuerdo entre los gobiernos federal y estatal, para definir quién se hace responsable.

Todo indica que ante la animadversión que prevalece entre ambos gobiernos, las evidentes contradicciones y hasta desinterés del Ejecutivo federal por atender este tema, el gobernador Silvano Aureoles Conejo no tendrá más remedio que presentar la controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, para que de una vez por todas, se defina quién tiene la razón y haya un

poco más de certeza para los profesores michoacanos, en el pago de sus quincenas. Eso sí, a la par tendría que iniciar una auditoría y reingeniería del sector educativo, para evitar que prevalezca ese barril sin fondo con acusaciones mutuas entre autoridades y líderes sindicales de presuntas irregularidades, venta de plazas, aviadores y abusos, entre otras lindezas.

Total que difícilmente se puede ser optimista cuando está claro que el gobierno estatal tiene una papa caliente entre las manos, sin visos contundentes de solución y sí en cambio, una evidente dificultad para trabajar en equipo con la federación. Los enconos generados en la contienda electoral y la disputa que se generó entre perredistas y morenistas, sigue causando estragos con lamentable perjuicio a todos los michoacanos.

En fin, no resta más que hacer votos porque las autoridades federales y estatales retomen la cordura, alcancen una mira de estadistas y dejen de pensar sólo en sus asuntos particulares y electorales, porque de seguir así, será un año de bloqueos, marchas, plantones, desaceleración económica, menos empleos y el consecuente crecimiento de los delitos.

Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias. cmongem@hotmail.com

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